BOSTON, MASSACHUSETTS - OCTOBER 29: Jaylen Brown #7 of the Boston Celtics gestures after making a three-point basket against the Cleveland Cavaliers during the second quarter at the TD Garden on October 29, 2025 in Boston, Massachusetts. NOTE TO USER: User expressly acknowledges and agrees that, by downloading and or using this photograph, User is consenting to the terms and conditions of the Getty Images License Agreement. (Photo by Brian Fluharty/Getty Images)
Metieron 2 grandes triunfos y, en una temporada que parecía que iba a ser muy oscura para los de verde, tal vez puedan encontrar algo de esperanza.
Después de un comienzo incierto con tres derrotas consecutivas, los Boston Celtics silenciaron las dudas y recuperaron su esencia ganadora. Muchos habían interpretado ese inicio como el comienzo de una etapa de decadencia, pero el equipo de Joe Mazzulla respondió con carácter, encadenando tres victorias seguidas y demostrando que el espíritu competitivo sigue intacto en Massachusetts.
El cambio de rumbo no fue casualidad. Los Celtics vencieron de manera consecutiva a dos rivales de peso: Cleveland Cavaliers, aspirantes al título, y los Sixers, que llegaron invictos al duelo. La victoria ante el conjunto de Pensilvania tuvo un significado especial, ya que sirvió como revancha por la derrota sufrida en la jornada inaugural en el TD Garden. Esta vez, Boston se impuso por 109-108, en un final cargado de tensión que se resolvió cuando Tyrese Maxey falló el tiro que pudo darle el triunfo a los Sixers.
Durante el encuentro, los Celtics llegaron a dominar por 24 puntos en el segundo cuarto, pero Philadelphia reaccionó y estuvo a un paso de la remontada. Boston, sin embargo, mantuvo la calma en los momentos críticos, apoyándose en su defensa y en la solidez colectiva para cerrar el partido con autoridad. El resultado no solo les permitió equilibrar su récord, sino también recuperar confianza tras un inicio turbulento.
La figura de Jaylen Brown fue clave en esta remontada emocional y deportiva. En ausencia de Jayson Tatum, el alero asumió el liderazgo del equipo con una actuación sobresaliente: 36 puntos, con un 68% de efectividad en tiros de campo (13/19). A su lado, Derrick White y Payton Pritchard sumaron 15 tantos cada uno, mientras que Anfernee Simons aportó 19 desde el banco. Boston, lejos de cualquier idea de tankear, quiere recuperar un estatus: el de candidato.